DE CUANDO LOS EZQUER CRUZARON EL CHARCO
Texto: Fernando Hualde
Hubo una vez en Isaba una persona apellidada Ezquer que decidió dar el paso de instalarse con su mujer y sus hijos en Méjico. Era el siglo XVII. Hoy sus descendientes encuentran en esta localidad roncalesas sus verdaderas raíces.
Nos hicimos eco hace unos meses en estas mismas páginas de ese extraño fenómeno migratorio que se dio en la localidad roncalesa de Isaba a lo largo de los primeros veinticinco años del siglo XX por el que más de un centenar de vecinos de este pueblo acabaron instalados, ellos y sus vidas, en varias pequeñas poblaciones de Nuevo México entre las que destacaba principalmente la localidad de Vaughn.
Ciertamente se puede comprobar que este éxodo de izabarres hacia ese punto tan concreto del mundo obedecía a un efecto reclamo que venía dándose al menos desde la segunda mitad del siglo XIX. Sin embargo se desconoce quien fue aquél primer vecino de Isaba que marchó allí, cuando, y porqué lo hizo. Es un misterio que se antoja difícil de desvelar.
Ya en aquél reportaje, que publicamos aquí el pasado 28 de octubre, apuntábamos una serie de hipótesis, que a día de hoy siguen siendo eso mismo, pero que podían arrojar alguna luz, muy tenue, sobre el porqué y el desde cuando.
En todo este tema, y de una manera ejemplar, viene trabajando en Isaba y en Nuevo México la denominada “Asociación Pro Isaba & Nuevo México – Isaba”, presidida por la izabar Soledad Marcilla (primera y única mujer en la milenaria historia del Tributo de las Tres Vacas que ha presidido esta ceremonia), con la colaboración de Valentín Urzainqui y de Josep Oms. Esta asociación está desarrollando una labor impresionante de investigación y de comunicación que ha permitido identificar a ese centenar de emigrantes que hubo en el siglo XX y recomponer con todo detalle sus árboles genealógicos.
Salvador Ezquer
Pues bien; esa acción contínua por parte de esta asociación de mover piezas aquí y allá, de investigar, de remover, además de dar los frutos citados, ha permitido recientemente dar un salto cualitativo en toda esta labor de reconocimiento hacia aquellas personas de Isaba que un día tuvieron que dejarlo todo y marchar hacia un mundo diferente y desconocido en el que alguien de su mismo pueblo preparaba su llegada garantizando allí casa y trabajo. La “Asociación Pro Isaba & Nuevo México – Isaba” ha conseguido en fechas recientes contactar con el joven abogado Armando Esquer, de la ciudad mejicana de Tijuana, descendiente directo de Salvador Ezquer Landa, nacido en Isaba en el año 1634, hijo de Blas y de Catalina, cuyo hijo Salvador Ezquer Ortiz, nacido en Sevilla, en la segunda mitad del siglo XVII marchó a Méjico. Por la razón que sea, en algún momento de la historia de los Ezquer en Méjico, la “z” quedó convertida en “s”, pasando por tanto de Ezquer a Esquer; parece que esto pudo suceder en aquél primer momento del siglo XVII a causa de la pronunciación vasca, pero no deja de ser una hipótesis.
Es así como Armando Esquer, acompañado de su mujer y de sus hijos, viajó a Isaba a principios de este mes de agosto, haciendo entrega en un acto celebrado en la Casa de la Memoria , de la copia encuadernada y cotejada notarialmente, de un documento firmado en Ciudad de Méjico el 13 de enero de 1697 en el que Salvador Ezquer Landa acredita su condición de roncalés para hacer valer sus derechos en aquél virreinato.
El apellido Ezquer
Ezquer, o Ezker, es un apellido roncalés. A lo largo de los siglos lo podemos encontrar escrito de las siguientes formas: Ezquer, Ezquerr, Ezquerra, Hezquer.
Aunque podríamos citar aquí miles de referencias de documentos que acreditan la existencia de los Ezquer en el valle de Roncal, me voy a limitar a exponer lo más relevante de esta saga familiar, siendo, como es, un apellido que todavía hoy goza en este valle de muy buena salud. He aquí algunos datos para la historia de este apellido.
Burgui.- Se conserva una relación de casas existente en esta villa en el año 1368, y entre ellas está la de Blasco Ezquerra.
En 1551 los documentos nos hablan de un asesinato cometido por Pedro Ezquer, quien acabó con la vida de su mujer. Y pocos años después, en el proceso que en 1569 se vivió en Burgui contra la brujería, vemos a Juliana Ezquer, de esta villa, acusada de bruja.
Dentro de la lista de alcaldes que se conocen de esta villa figuran los siguientes Ezquer: Miguel Ezquer (1752), y José Mª Ezquer (1859).
A finales del siglo XVIII (1793 principalmente) vemos la figura de Sebastián Ezquer, concejal, o jurado, de Burgui, que desarrolla una intensa actividad.
Garde.- En la calle Mayor de esta villa existe la denominada casa Ezquer, cuyo propietario es hoy Juan Anaut.
Dentro de la lista de alcaldes que se conocen de esta villa figura José Antonio Ezquer (1825).
Isaba.- Dentro de la relación de las 201 casas que había en Isaba en el año 1501 figura la de un tal Blasco Ezquer.
En una relación de casas del año 1635 encontramos la casa de Antonio Ezquer (barrio de Burguiberria), la de Catayn Ezquer (barrio de Burguiberria), y la de Joan Ezquer (barrio de Garatea y Cearchantea).
En otra relación de casas correspondiente al año 1646 figura la casa de Antonio Ezquer (barrio de Burguiberria), la casa de Margarita Ezquer (barrio de Burguiberria), y la casa de Diego Ezquer (barrio de Garardoya).
Es en el listado de casas de 1799 cuando encontramos mayor número de casas, que son las siguientes: casa de Miguel Ezquer (barrio de Garrardoya), casa de Lorenzo Ezquer (barrio de Izargentea), casa de Ángel Ezquer (barrio de Izargentea), casa de Ciprian Ezquer (barrio de Burguiberria), casa de Pedro Ezquer (barrio de Burguiberria), y casa de Lorenzo Ezquer Barace (barrio de Mendigacha).
En la actualidad no se conoce ninguna casa con el nombre de Ezquer, si bien, son numerosas las casas en Isaba habitadas por familias que poseen ese apellido.
A su vez, en la villa de Isaba ha habido los siguientes alcaldes con este apellido: Pedro Ezquer (1598), Antonio Ezquer (1645-1646), Antonio Ezquer (1660-1661), Esteban Ezquer (1683-1684), Lorenzo Ezquer (1691-1692), Pedro Ezquer (1697), Lorenzo Ezquer (1709-1710), Lorenzo Ezquer (1717), Lorenzo Ezquer (1723-1724), Lorenzo Ezquer (1728), Lorenzo Ezquer (1754), Ciprian Ezquer (1804-1805), Miguel Ezquer (1818-1819), Miguel Ezquer (1823-1824), Ciprian Luis Ezquer (1829), Ciprian Luis Ezquer (1835), y Lorenzo Ezquer (1914-1915).
Así pues, como ya ha quedado dicho, 4 de agosto de 2008 Armando Esquer, de 41 años, nacido en Tijuana (Méjico), hace entrega en la Casa de la Memoria de una copia cotejada de un documento de 1697 que certifica que un antepasado suyo, Salvador Ezquer Ortiz, nacido en Sevilla (posteriormente emigra a Méjico), es hijo de Salvador Ortiz Landa (natural de Isaba), y nieto de Blas Ezquer (natural de Isaba), a la vez que hace uso de las armas (escudo) del valle y acredita, como roncalés, su hidalguía. El mencionado Blas Ezquer era hijo de Salvador Ezquer (nacido en Isaba en 1562), que en 1598 testifica como testigo del prendamiendo de ganado roncalés en el término de Isaba por parte de vecinos de la tierra de Sola (Francia).
Blas Ezquer fue concejal, o jurado, de la villa de Isaba, al menos, en el año 1609. Igualmente ejerció de representante del izabar Vicente Ros (residente en Sevilla y posteriormente en Cádiz), que fue quien financió la construcción de un nuevo retablo para la Virgen de Idoya, en su ermita, así como la construcción de una capilla lateral en esa misma ermita, dedicada a San Francisco Javier.
Roncalés era también, muy probablemente de Isaba, don Tomás Ezquer, que siglos atrás fue deán de la Catedral de Ciudad Rodrigo.
Vidangoz.- Dentro de la lista de alcaldes que se conocen de esta villa figuran los siguientes: Ezquer: Domingo Ezquer (1607).
Además de este breve historial del apellido Ezquer dentro del valle de Roncal, es bueno recordar que la huella de este apellido está bastante extendida por toda Navarra. La trashumancia y las almadías han tenido mucho que ver en esto. En cualquier caso sépase que en localidades como Iso (Romanzado), Izalzu (Salazar), o Larequi (Urraul), existen casas con este nombre.
De Isaba a Méjico
Vemos cómo en aquél final del siglo XVII Salvador Ezquer Ortiz emigra a Méjico. Él había nacido en Sevilla, si bien sus padres, sus abuelos, sus bisabuelos... eran de Isaba. La pregunta salta de inmediato, ¿qué hacía un izabar en Sevilla?; no lo sabemos, pero sí que sabemos que su abuelo Blas ejercía en Isaba el papel de representante de Vicente Ros, que era natural de Isaba, residente en Sevilla (y posteriormente en Cadiz), que ejerció de bienhechor en su villa natal sufragando algunos gastos de arreglo y reforma de la ermita de la Virgen de Idoya.
A partir de allí lo que sabemos es que Salvador Ezquer Ortiz se instala en Méjico, y que con él nace en aquél país una saga familiar, de apellido Esquer, que está siendo minuciosamente recompuesta por los actuales descendientes directos de aquél pionero izabar; destaca en este trabajo la labor de Marie Stella Cardoza. El apellido Esquer está fuertemente implantado en enclaves como Sonora, Álamos, Tijuana, etc., siendo una saga que se asentó inicialmente en Culiacán, Sinaloa, Sonora, y la propia ciudad de Méjico. Desde entonces hasta hoy el apellido Esquer se ha extendido por buena parte de Méjico; lo encontramos en el folclore, en la política, en el deporte, en la industria. Y no debemos de olvidar que en el siglo XVII lo que hoy en Estados Unidos se conoce como Nuevo México, pertenecía entonces al virreinato de Nueva España, Méjico hoy; es por ello que se entremezcla la saga Ezquer, o Esquer, en toda esa zona, independientemente de que caiga a un lado o a otro de la frontera. No es casual que una ciudad como Mexicali, en la Baja California , tenga una avenida dedicada a Isaba.
Como cosa curiosa diremos que en Isaba el vecino Gerardo Ezquer se sometió a un análisis de su ADN, y lo mismo hizo en Méjico Armando Esquer, uno de los descendientes directos de aquél Salvador Ezquer que se asentó en Méjico con su mujer y sus hijos (Juan Salvador, Blas, y Fernando) en 1695; y lo sorprendente es que el ADN de uno y de otro coincidían en su totalidad.
En fin, queda aquí todo un mundo por investigar. Lo mejor es que ya hay gente dedicada a ello. Sea lo que fuere, lo cierto es que la figura de Salvador Ezquer, en el siglo XVII, podría ser la clave para llegar a entender todo el fenómeno migratorio que hubo en Isaba hacia Nuevo México.
Alguien, en concreto la “Asociación Pro Isaba & Nuevo México – Isaba”, ha removido oportunamente una historia que amenazaba ya con diluirse en el olvido. La villa roncalesa de Isaba tiene su prolongación sanguínea no solamente en los valles vecinos, en tierras de la Ribera de Navarra, y en tierras aragonesas, sino también al otro lado del charco, en una zona muy concreta de Méjico y de Nuevo México. Allá, en aquellas tierras, son cientos las personas que tienen puesta su mirada en la tierra que cobija sus raíces.
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